El nuevo equipo de gobierno (Suma pel Canvi-Convergència) suprimirá 850 metros de carril bici habilitados hace dos años en Can Picafort para no interferir con las terrazas de los bares. Así lo anunció el delegado de Can Picafort, Joan Monjo (Convergència) durante el último pleno municipal.
La obra, ejecutada la legislatura pasada por la Conselleria de Medi Ambient del Govern de les Illes Balears daba continuidad a los tramos de paseo y carril existentes anteriormente que discurrían entre Son Bauló y la Plaça Cervantes.
Críticas
El caso es que, a diferencia de lo que ocurría en los dos primeros tramos, en estos 850 metros de paseo, situados entre la calle Alcántara Penya y la calle del Mar, el espacio entre la primera línea urbana y el mar es mucho más estrecho por lo que desde un primer momento surgieron críticas de los propietarios de bares y restaurantes que veían peligrar sus negocios durante la temporada alta.
Las obras de construcción del tercer tramo del paseo comenzaron en 2009 con una inversión prevista de 3.326.315,74 euros. El proyecto que se adjudicó y estuvo a exposición pública contemplaba la prolongación del paseo, pero en diciembre de 2009, una vez iniciadas las obras, el entonces conseller de Medi Ambient, el uemita Miquel Àngel Grimalt explicaba a pie de obra que el paseo no incorporaría el carril sino un adoquinado uniforme con la posibilidad de que más adelante el Ajuntament pintara los adoquines si deseaba habilitar el carril para bicicletas.
Las protestas del Ajuntament no se hicieron esperar y en noviembre de 2010 con UM ya fuera del Govern balear, el nuevo director general de Ordenació del Territori del Govern, Bernat Aguiló (PSM-Iniciativa Verds) anunciaba la reincorporación del carril bici al proyecto. Medi Ambient dejaba en manos del Ajuntament la decisión de establecer mecanismos de control adecuados para hacer compatibles los usos.