Un centenar de padres, alumnos y profesores del colegio público Llorenç Riber de Campanet se manifestaron ayer a primera hora de la mañana en protesta por los recortes presupuestarios que provocan que, desde principio de curso, las seis aulas de infantil de 3 a 6 años que hay operativas dispongan únicamente de cinco tutores y un profesor de apoyo, cuando lo habitual es que un colegio de doble línea (dos aulas por curso) disponga de seis maestros de infantil y dos maestros de apoyo.
El colegio fue ampliado hace ahora un año después de una década de reivindicaciones incrementando su capacidad en 125 plazas escolares, 50 de ellas de infantil y 75 de primaria. Así, el centro disponía el curso pasado de seis aulas de infantil y siete de primaria, y se aparcaba para una segunda fase una mayor ampliación física que permitiría desdoblar el resto de cursos.
Pero no ha sido así. Los recortes presupuestarios han hecho mella de manera que oficialmente el curso 2011-2012 dispone únicamente de cinco aulas de infantil (cuatro de ellas de 4 y 5 años) y una única aula de 3 años con una ratio de 31 alumnos (seis más de la ratio prevista por ley).
La dirección del centro ha mantenido el desdoblamiento previsto inicialmente para reducir a la mitad dicha ratio, pero el Govern no le ha enviado el tutor que solicitaba por lo que utilizan al profesor de apoyo para dicho fin, dejando sin apoyo a todo el ciclo educativo.
«La única respuesta que nos dan desde el Govern es que destinemos un maestro de primaria al ciclo de infantil, pero eso no es una solución», dice el director del centro, Llorenç Palou.
La Asociación de Padres y Madres de Alumnos no descarta nuevas movilizaciones.