El Llevant se mojó ayer para exigir el retorno del tren. Ni el tiempo, ni el fuerte viento ni la intensa lluvia que cayó durante toda la mañana consiguieron parar una marcha que fue todo un éxito y que, dadas las inclemencias meteorológicas, superó las expectativas de los organizadores. Alrededor de 2.500 personas, según la plataforma en defensa del tren, se concentraron en el Polideportivo es Pinaró de Son Servera y fueron un clamor por el tren. La manifestación transcurrió según el plan previsto. Los participantes partieron de seis puntos diferentes (Manacor, Son Carrió, Son Servera, Sant Llorenç, Artà, Capdepera y Cala Rajada). Algunos lo hicieron en coche o en el bus habilitado para la ocasión debido a la tormenta. Pero los más valientes, alrededor de 500 personas, decidieron hacer el recorrido por carretera (Son Servera-Cala Rajada o Sant Llorenç-Son Servera). Iban por el arcén y en todo momento fueron acompañados por la Policía Local de los municipios de la comarca, la Guardia Civil y Protección Civil. No se registró ningún incidente ni tampoco hubo retenciones de tránsito.
El acto contó con una gran asistencia de políticos: los alcaldes y regidores de la comarca a excepción del PP. También estuvo la plana mayor del PSOE, Francina Armengol, Cosme Bonet, Antoni Manchado o Isabel Oliver; del PSM-IV-ExM: Miquel Ensenyat y David Abril, otros nacionalistas como Gabriel Vicens, Pere Sampol, Antoni Verger, Joan Font, o de Esquerra Unida como Manel Carmona entre otros muchos.
Pep Álvarez, Toni Nicolau, Marisa Rojas y Lluís Gili llevaron la voz cantante del manifiesto que exigió el cumplimento del convenio ferroviario y que se reanuden ya las obras.