La deuda del Govern y del Consell no se limita a las constructoras o a las entidades pro-discapacitados psíquicos, sino que también afecta a las residencias concertadas para personas mayores.
Sólo a Novaedat -empresa que gestiona los centros de Inca, Montuïri, Port de Pollença, Can Picafort, Manacor y Sant Joan- el Institut Mallorquí d'Afers Socials (organismo dependiente del Consell) le debe entre dos y tres millones de euros. Pese a no confirmar la cifra, el Consell admite la existencia de «retrasos» a la hora de efectuar los pagos.
El servicio se ha seguido prestando con normalidad, pero los trabajadores de Novaedat han cobrado las nóminas de algunos meses con demora. Aunque la empresa declina hacer declaraciones, el retraso debe atribuirse a los impagos de la administración. Cabe matizar, asimismo, que las residencias concertadas se financian a través del Consell con fondos del Govern. En este sentido, el primero que pagó con retraso fue el Govern.
Torres reclama
A raíz de un escrito del sindicato CC.OO. para ponerle al corriente de las demoras, el alcalde de Inca, Rafel Torres (PP), enviará hoy una carta al presidente del Govern y otra a la del Consell para reclamar que liquiden la deuda con la mayor brevedad posible. «Comprendo los problemas económicos que tienen, y sé que son heredados, pero al tratarse de servicios sociales hay que hacer un esfuerzo especial, por esto les pido que paguen dentro los plazos establecidos. Mi equipo de gobierno lo hace en el Ajuntament d'Inca y espero que el Govern y el Consell hagan lo mismo», manifestó Torres.