Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM), empresa pública dependiente del Govern, no puede garantizar el suministro de combustible a los trenes a partir de octubre. Así lo dijo ayer su gerente, José Ramón Orta, quien aseguró que la imposibilidad de contratar la limpieza de las estaciones es «el menor de los problemas» que afectan a SFM. «Hay otros que afectan a la pervivencia del servicio, el anterior Govern no nos dejó partidas económicas libres, ni siquiera para contratar el suministro de gasoil a los trenes», dice Orta, que califica la situación de «dramática».
El gerente de SFM explicó que «el contrato de suministro de gasóleo para los trenes acaba en octubre y mientras no haya una consignación presupuestaria no se puede contratar un nuevo suministro».
«El conseller Company está muy preocupado por la situación y está presionando para disponer de crédito suficiente porque cree en el tren y le preocupa la situación», dijo Orta quien asegura que «Company está presionando para desbloquear partidas esenciales».
'Deplorable'
Respecto a la limpieza de las estaciones de la Part Forana el gerente de SFM solicita el compromiso de los alcaldes, sin contraprestación posible. «¿Cómo les vamos a compensar? Nuestra situación es dramática y al fin y al cabo es en beneficio de los propios ciudadanos que son los que al final utilizan el servicio», dice Orta. «Pido disculpas, pero la situación que nos hemos encontrado es dramática», añadió.
El alcalde de Inca, Rafel Torres (PP), se comprometió ayer en una reunión que mantuvo con Orta a asumir temporalmente la limpieza de la estación de autobuses y del entorno de la estación de tren, incluidos los túneles que unen la parte vieja de la ciudad con la barriada de Crist Rei. El Ajuntament también se hará cargo del mantenimiento de la zona verde y los jardines contiguos a la vía férrea. El edificio viejo de la estación de tren, que se está reformando, y los andenes, lo seguirán limpiando operarios de Serveis Ferroviaris, explicó Torres tras reunirse con Orta.
El alcalde de Inca calificó de «deplorable» la imagen que ha ofrecido algunos días de este verano la estación de la capital del Raiguer. «Le he transmitido al gerente que esta imagen no podía se podía repetir», aseguró el munícipe.