El alcalde de Calvià, Manuel Onieva, ha garantizado que no subirá el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) durante la legislatura que acaba de comenzar y ha destacado las diferentes medidas adoptadas por su equipo para recortar gastos en el Ayuntamiento.
El gobierno municipal que preside Onieva ha emitido hoy un comunicado para rechazar las críticas sobre supuestas subidas de impuestos formuladas por la oposición municipal y recalcar su propósito de congelar el IBI al margen de que las revisiones catastrales determinen el incremento del valor de los inmuebles.
El equipo de Onieva explica que ha recortado el gasto en asesores ("personal de apoyo técnico) en un 36 % respecto al año pasado, y ha rebajado a la mitad el presupuesto para sueldos de gerentes de empresas públicas e institutos municipales, además de rebajar los emolumentos de alcalde, tenientes de alcalde y concejales.
Asimismo, el gobierno municipal atribuye buena parte del déficit del consistorio a «la dejación de sus responsabilidades que practicaron con Calvia, durante la pasada legislatura, tanto el gobierno socialista del Consell de Mallorca, con Francina Armengol al frente, como el Govern de Francesc Antich, incumpliendo convenios y dejando a un lado a Calvia y a los calvianers».