Un informe elaborado por la Cámara de Comercio en mayo del pasado año, a petición del vicepresidente de la entidad Josep Lluis Roses, apuntaba que el volumen de usuarios reales del tramo entre Manacor y Artà de la línea férrea «se sitúa a una tercera parte de la estimada por el Govern».
En cifras absolutas, el estudio de la Cámara considera que con una previsión «moderada» la línea entre Manacor y Artà sería utilizada por un total de 252.000 personas, incluyendo en este paquete la eventual demanda generada por los turistas de la zona. En cuanto a los usuarios residentes en los tres municipios afectados -Son Servera, Sant Llorenç y Artà- el número potencial de usuarios sería de 111.000 pasajeros. Este sería el número de usuarios excluyendo la demanda que generaría Manacor.
El documento de la Cámara de Comercio admite que sus cálculos se aproximan a los avanzados por la Asociación de Amigos del Ferrocarril, entidad que fijaba una demanda potencial de 100 mil pasajeros en los meses de invierno y 200.000 en los meses de verano.
Cabe indicar que según el escenario presentado por el Govern para justificar la ampliación de la línea férrea entre Manacor y Artà era de 639.000 pasajeros.
El coste del proyecto, según información de Serveis Ferroviaris de Mallorca, estaba estimado en torno a los 190 millones de euros, con cargo a fondos del Estado.
El coste estimado por año y usuario de este tramo de la vía férrea, en función de la demanda estimada, significaría un coste de 377 euros por pasajeros y año.
El estudio realizado por los técnicos de la Cámara de Comercio abarcan distintos escenarios de la demanda.