El anuncio del Govern de paralizar las obras del tren de Manacor-Artà por falta de recursos económicos no ha dejado indiferente a nadie. Los alcaldes de la comarca afectados por esta infraestructura, excepto el de Manacor, han mostrado su desacuerdo con esta decisión y piden al president José Ramón Bauzá que busque financiación para que la recuperación de la línea sea una realidad.
Ayer desde la Conselleria de Agricultura, Medi Ambient y Territori manifestaron que todavía no se ha tomado una decisión sobre el futuro de las unidades de Tram Tren adquiridas que ya han llegado a la isla y se encuentran almacenadas.
Uno de los alcaldes más indignados es el de Son Servera, Josep Barrientos. Las obras del tren tienen cerrado un tramo de la Avinguda Joan Servera Camps que conecta el pueblo con la zona costera. También está el carril bici que no se puede utilizar. «Bauzá debería recordar cuales son sus orígenes y ver que el pueblo no puede quedar de esta manera. Este es un aviso. No nos quedaremos de brazos cruzados ante este situación», advierte.
El alcalde de Artà, Jaume Alzamora, también consideró que «es una mala noticia para el pueblo». Por su parte, el alcalde de Sant Llorenç, Mateu Puigrós, recuerda que hay más de la mitad de las obras ejecutadas y pide a Bauzá que encuentre «sistemas de financiación». El alcalde de Manacor, Antoni Pastor, defendió que «la decisión obedece a motivos económicos».
Desde el GOB también criticaron que «el Ejecutivo no tiene interés en crear una red de transporte sostenible. Sólo les interesa poner más asfalto».
También, desde el PSM-Entesa -Iniciativa sostienen que es una «irresponsabilidad» que el Govern renuncie al único convenio ferroviario que ha conseguido Balears después de muchos años de reivindicaciones».