Los vecinos del Camí de Pedaç, en Binissalem, no quieren antenas de telefonía móvil cerca de sus casas. El Ajuntament de Binissalem retiró hace unas semanas las diversas antenas que había repartidas por el casco urbano y las sustituyó por una más grande, de unos 25 metros de altura, que colocaron en un solar municipal, situado en el polígono industrial y que limita con el Camí de Pedaç.
En esta vía viven cerca de 50 vecinos y se encuentra también el polideportivo, el colegio público y el instituto.
Los vecinos de la zona no entienden como el Consistorio «ha sacado las antenas del pueblo, quitándose el problema de encima» y las han puesto junto a su casa, «con el riesgo que todo esto supone». Los afectados han iniciado una recogida de firmas para pedir que se traslade la antena de lugar y no descartan movilizaciones, ya que se sienten «muy dolidos» por el trato recibido. Lo que más les ha molestado, es el hecho que el Consistorio no les informaran sobre la colocación de la antena. José Fernández (PP), regidor de Urbanismo, asevera que «el Consistorio decidió sacar las antenas del pueblo después de que se recogieran 600 firmas y tuviera lugar una manifestación reivindicativa». Fernández sostiene que tanto él, como el alcalde de Binissalem, Jeroni Salom (PP), no eran «partidarios de sacar las antenas del casco urbano».