El toro más famoso de Mallorca ha vuelto a cambiar de piel. Ayer, el polémico toro de Osborne amaneció pintado de flores de color rojo y blanco y con un slogan muy comercial: «Ja es primavera a Son Munar!».
Sólo han pasado cuatro días desde que varias asociaciones como Círculo Balear, Tertulias del Mesón, Polillas de Baleares y Federación de Peñas Taurinas de Baleares repintara el animal - que lucía multicolor- de negro en un acto, ante los medios de comunicación, de exaltación del «orgullo patrio». Una actuación que no estuvo exenta de polémica y que disgustó al propietario de los terrenos ya que, según comentó, no había dado permiso para entrar en los terrenos de Son Munar.
La nueva imagen del bravo, muy primaveral, estaba ayer en boca de todos y el animal fue el auténtico protagonista de las redes sociales. Lo cierto es que esta imagen publicitaria se ha venido utilizando desde hace tiempo para llevar a cabo diversas acciones reivindicativas: se ha vestido de siurell, con los colores del arcoiris y ha lucido pintadas antitaurinas o independentistas. Una nueva acción se sumaba ayer a esta larga lista.
Las reacciones no se hicieron esperar y el presidente del Círculo Balear, Jorge Campos, adelantó que «volveremos a pintar el toro de Osborne y será de manera inminente».
Campos lamentaba que «es triste que no lo hagan las administraciones, puesto que es una pena que no se proteja un bien cultural declarado».
Quien está ya bastante cansado es el propietario de la finca de Son Munar. Ayer apeló al sentido común y expresó que «ahora ya deberían dejar el toro. Es gamberrismo y quien quiera pintar que lo haga en su casa. Esto es invadir la propiedad privada».