Los cuatro años de legislatura en Campanet han sido muy movidos. El equipo de gobierno, formado por PSOE y PSM, ha protagonizado claras controversias, de las cuales ninguna de las dos formaciones se ha escondido, pero defienden que «pese a los diferentes puntos de vista siempre hemos terminado poniéndonos de acuerdo en favor del pueblo».
Joan Amengual ha conseguido en esta legislatura ser el primer alcalde socialista del municipio y cree que el hecho de haber estado en el Gobierno les reforzará de cara a las elecciones. Amengual, quien se presenta por quinta vez, asegura que si el PSOE consigue la Alcaldía «apostaremos por reducir el gasto de agua, basura y electricidad». El PSM, por su parte, apuesta por segunda vez por Francesc Morell tras la marcha del histórico Francesc Aguiló. Morell se enfrenta a la Alcaldía con ganas de conseguir de nuevo «la mayoría absoluta» que perdieron en los anteriores comicios y asevera que «la ronda de circunvalación es la asignatura pendiente».
El candidato del PP, Miquel Pons, confiesa sentirse «tranquilo y preparado» para ser alcalde y asegura que si gana las elecciones primará «mejorar el día a día y mantener las construcciones que hay en el pueblo». Las elecciones de este año también estarán marcadas por la ausencia de UM, partido que desde 1999 se habían presentado a los comicios.