Esquerra ha presentado una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado para que se reserve una partida destinada a regenerar el vertedero del Puig, en Alaró.
Los nacionalistas han anunciado esta medida tras salir a la luz una sentencia que obliga al Ajuntament d'Alaró a limpiar y regenerar el vertedero, acción que está presupuestada inicialmente con 12 millones de euros. Si el Ajuntament (PP) no responde, el alcalde de Alaró, Joan Simonet, y los demás regidores tendrán que pagar regularmente una multa de 600 euros.
Inasumuble
«Esta cantidad es inasumible por parte del Consistorio, ya que cuadriplica el presupuesto anual del municipio», explica Joan Lladó, presidente de Esquerra.
Según Lladó, «el culpable de la situación actual del vertedero no es el Consistorio actual, ya que desde la década de los 50 se han ido depositando residuos tóxicos en el lugar y éste fue comprado por el Ajuntament en los 90 (por entonces en manos socialistas) e hizo caso omiso en reiteradas ocasiones de los avisos de la Justicia».
«Los alaroners están muy preocupados y, por ello, hemos decidió actuar, ya que no se puede dar la culpa a los más débiles. El Govern y el Consell tienen parte de responsabilidad» explica Joan Vicenç Lillo, secretario de política territorial del partido.
El alcalde Joan Simonet por su parte, tilda de «absurdo» el anuncio de Esquerra, ya que considera que «no se puede pedir dinero cuando todavía no se sabe exactamente la cifra que costará limpiar y adecentar el vertedero». «Todo son suposiciones» sostiene.
En la Isla, la situación actual de los vertederos ilegales es crítica. Aunque no están contabilizados en su totalidad, se cree que cada municipio dispone al menos de uno o dos.