El president del Govern balear, Francesc Antich, inauguró ayer tarde, acompañado del alcalde de Campanet, Joan Amengual, la ampliación del colegio público Llorenç Riber que estrena este curso 125 plazas escolares, 50 de ellas de infantil y 75 de primaria.
El centro se convierte, así, tras una década de reivindicaciones, en un colegio de línea y media con dos líneas completas de educación infantil (dos aulas por curso) y una única línea de primaria con siete aulas (sólo un curso está desdoblado).
Segunda Fase
La Conselleria d'Educació del Govern de les Illes Balears trabajará a partir de ahora en la redacción del proyecto necesario para completar la ampliación de la escuela hasta convertirla en un centro de doble línea al uso, con seis aulas de infantil y 12 de primaria. Aunque esta segunda fase del proyecto aún no tiene fecha.
El director de la escuela Llorenç Palou, reivindicó ayer la necesidad de completar dicha ampliación a la vez que explicó que las obras han sido especialmente delicadas porque se han tenido que simultanear con las clases lectivas, sin que ello supusiera molestias.
La ampliación del CEIP Llorenç Riber de Campanet ha costado más de un millón de euros. Se ha actuado sobre una superficie de 873 metros cuadrados incorporando además de las clases de infantil y primaria propiamente dichas otras aulas destinadas a música, primeros auxilios y baños adaptados a las aulas de infantil, además de ampliar el comedor.
Durante esta primera fase de ampliación de la escuela el edificio se ha dejado preparado para poder asumir más adelante la segunda fase de la obra. En esta primera fase se ha construido un nuevo edificio que dispone de sótano, planta baja y primera planta, adosado al edificio ya existente.
El colegio Llorenç Riber tiene actualmente 232 alumnos matriculados distribuidos en 13 aulas de educación infantil y de primaria.