Los propietarios de la finca donde se encuentra ubicada la playa virgen de Cala Varques «exigen desde hace cinco años a las administraciones competentes que acaben con los peligros que el exceso de visitantes provoca en el entorno natural de la playa», explicó ayer a este periódico Antoni Sastre, el representante legal de los propietarios.
Por eso, ha presentado un plan de actuaciones al Ajuntament para acabar con los peligros que amenazan la playa virgen y su entorno.
Aparcamiento
La prioridad de los propietarios es «llegar a un acuerdo con el Consistorio para que mejore el camino de acceso a la playa, que es de titularidad pública, para que los bomberos y todos los servicios de emergencias puedan llegar sin problemas a Cala Varques», manifestó Sastre.
Además, la próxima semana los propietarios se reunirán con los representantes municipales para llegar a un acuerdo para abrir un párking y así liberar de coches aparcados el camino actual, unos coches que pueden dificultar el paso de los servicios de emergencias. Los propietarios de la finca estudian «fórmulas que ya funcionan en otros lugares de las Islas» para presentar una propuesta firme. Así, apuntan a la conversión de una antigua caseta en un chiringuito y baños para dotar de servicios una de las playas más visitadas.