De momento, sin acuerdo pero «viendo un rayo de luz». Así se mostraron ayer trabajadores de la fábrica de calzado Kollflex después de afrontar el final de vacaciones y el regreso al lugar de trabajo cerrado en el que «no existe actividad», según informó la empresa con el envío de un burofax a los 21 empleados el pasado jueves, advirtiéndoles de que no volvieran ayer a sus puestos.
Sin embargo, la plantilla acudió puntualmente a las 7,30 horas a la fábrica de Selva, donde encontró las barreras abiertas y una patrulla de la Guardia Civil a las puertas. Allí, mantuvieron un primer encuentro con los propietarios para llegar a un determinación. «Se ve que tienen prisa por firmar un acuerdo y quieren que aceptemos sus condiciones», aseguró el delegado sindical de los trabajadores, Manuel Ferrón. Además, dejó claro que «hay un acuerdo firmado en 2009 que prevé que se pagarán 30 días por cada 26 mensualidades, mientras que ahora nos ofrecen 20 días por cada 12. Además, no hemos cobrado la nómina de julio».
Sospechas
Así las cosas, Ferrón explicó que desde la dirección se ha confirmado que «no hay trabajo y se ha aguantado lo que se ha podido», aunque la plantilla desconfía de este argumento, ya que «creemos que lo que quieren es sacar la producción fuera de Mallorca para abaratar costes». Por su parte, el secretario de organización de Salud Laboral de Fiteqa (Federación de Industrias, Textil, Piel, Químicas y Afines), Lluís Caldés, expresó que «ahora mismo tenemos una confianza mínima con la empresa». Caldés añadió que «se trata de una situación en la que una empresa cierra alegando pérdidas, cuando la realidad es que quieren externalizar la producción».
El director general de Trabajo, Iago Negueruela, se reunió ayer a mediodía con trabajadores y representantes sindicales para llegar a un acuerdo. «Hemos salido igual que hemos entrado ya que ha venido el abogado de la propiedad y nos ha vuelto ofrecer lo mismo que por la mañana», comentaron fuentes sindicales.
Por este motivo, hoy tendrá lugar una nueva reunión entre las partes, donde previsiblemente acudirán los propietarios para intentar normalizar la situación. Aún así, la plantilla se reunirá en asamblea, a partir de las 16 horas, en la sede de CCOO de Inca.