La reparación del muro del instituto de Santa Margalida, que se derrumbó en mayo del 2009, parece estar más cerca. El alcalde del municipio, Martí Torres, se reunió ayer con representantes del Instituto de Infraestructuras y Servicios Educativos y Culturales (IBISEC), para acercar posturas. Torres les hizo entrega del proyecto de mejora del muro que ha sido elaborado por el arquitecto municipal y donde se prevé que se realice una inversión de un millón doscientos mil euros.
El principal problema radica en que el Consistorio no dispone del suficiente dinero para afrontar las obras. Según Torres «el Ajuntament sólo puede invertir 400.000 euros ya que el decreto de Zapatero que impide endeudarnos nos corta las alas». «Es una situación complicada pero creo que Educació y el Ajuntament debemos solucionar el problema juntos» explica el alcalde.
La responsabilidad de quien tiene que sufragar las obras no está clara. Un informe jurídico señala que el Consistorio, como propietario de los terrenos, tiene que afrontar los gastos pero un convenio que firmaron el Ministerio de Educación y el Ajuntament en 1995 establece que el mantenimiento del instituto debe correr a cargo del Ministerio.