Andratx quiere tener presentes a sus conciudadanos más queridos como forma de agradecimiento por su labor a lo largo de sus vidas. Por ese motivo, el Ajuntament ha dedicado dos calles del municipio al escritor Baltasar Porcel y a la farmacéutica Francisca Mandilego, dos vecinos ya fallecidos con profesiones bien diferentes pero igualmente apreciados.
En un emotivo acto, ayer se descubrieron las placas de ambas calles en presencia de los familiares y amigos de los homenajeados, que estuvieron acompañados por la alcaldesa Isabel Alemany y la regidora de Cultura, Antònia Ensenyat, entre otros.
La viuda de Baltasar Porcel, Maria Àngels Roque, agradeció la iniciativa del Ajuntament y consideró que una calle mantiene vivo el recuerdo. Asimismo valoró que la calle sea peatonal porque Porcel «no era partidario de los coches».
Igual de emotivo resultó el acto de inauguración de la calle Francisca Mandilego, quien en su calidad de farmacéutica ayudó a los vecinos «como si fuera médico», según destacó su nieto.
La alcaldesa Alemany anunció su intención de crear un museo para recordar a los personajes que por un motivo u otro han sido importantes para la historia del municipio y que su recuerdo esté presente.