Un trueque entre deudores. Un empresario de la construcción inquer ha propuesto al Ajuntament conmutar una deuda que ambos -empresa y Corporación- tienen pendientes de liquidar.
El empresario registró un escrito en el Consistorio en el cual se «dan por satisfechos» una serie de recibos de tasas e impuestos municipales cuyo importe asciende a 5.557 euros. Se trata de una veintena de recibos (IBI, impuesto de circulación y tasas) que el Ajuntament ha facturado tanto a la empresa -a la sociedad- como a su propietario. Estos recibos «se pagarán a la empresa mencionada como cantidad a cuenta de las facturas» que el Consistorio les debe, prosigue el escrito. El empresario también menciona «las dificultades de tesorería causadas por la deuda acumulada» y «una conversación» previa mantenida con el alcalde, Pere Rotger. En el escrito no se especifica la cantidad exacta que el Consistorio adeuda a la empresa.
El concejal de Hacienda, Lluís Ferrari, explicó que los servicios jurídicos municipales estudian la compensación o permuta que el empresario da por hecha. «Si se cumplen los requisitos legislativos establecidos saldrá adelante», aseguró.