«Hemos aportado documentación que demuestra que todo el mundo sabía que el polígono industrial iba a construirse en aquel solar». Eso dijo el alcalde de Maria, Antoni Mulet, después de declarar ante la juez por un supuesto delito de aprovechamiento de información privilegiada en la recalificación de los terrenos donde está previsto construir el polígono industrial.
Presuntamente, el alcalde de Maria habría anticipado al promotor Antoni Crespí "socio de dos familiares en otra empresa" que el polígono se construiría en unos solares inicialmente destinados a la escuela.
Mulet explicó que había presentado a la juez un acta de pleno en la que se explicitaba que el Consistorio quería construir el polígono en los solares mencionados y una solicitud de venta cuyos propietarios habían presentado al Ajuntament. Según el alcalde, ambos documentos desmienten los cargos que se le imputan y prueban que era público que el Consistorio quería instalar el polígono allí. La comparecencia del primer edil duró poco más de hora y media.
Siguiendo la recomendación de su abogado, Mulet se acogió al derecho constitucional de no declarar y no respondió a ninguna de las preguntas que le hizo el abogado que representa a la Agrupación Socialista de Maria, Miquel Llompart. Según la defensa del alcalde, la agrupación del POSE en Maria solo puede personarse en la causa como acusación popular y no como acusación particular. Llompart, por su parte, entiende que sí puede personarse como acusación particular, «ya que somos parte afectada e interesada: tenemos intereses legítimos». La juez deberá dirimir ahora este aspecto formal. Llompart también recalcó que tras la declaración del alcalde «aún quedan muchos aspectos por aclarar». Mulet declaró ayer después de que su comparecencia se hubiera aplazado en tres ocasiones. Los próximos a declarar por este mismo caso, en calidad de testigos, serán los antiguos propietarios de los solares, Miquel Mas Ribas y su hijo. Ellos fueron quienes vendieron las parcelas al promotor del polígono, Antoni Crespí.