La ciudad de Manacor y a la vez toda la comarca del Llevant cuenta con un centro pionero en las Islas para resolver conflictos a través de la mediación. Sus responsables señalan que el centro «va destinado a todas las personas que partan de la base que quieran resolver su problema hablando, con la otra parte implicada, en el conflicto».
Separaciones, divorcios, herencias, conflictos a la hora de hacerse cargo de personas mayores, mediación entre vecinos, entre arrendatarios y propietarios todo ello como una alternativa al juicio, convirtiéndose casi en un equivalente al Juez de Paz.
Según dos de las responsables, Xisca Amengual y Catalina Bassa, «el carácter reservado de los mallorquines, que hace que podamos estar años sin hablar con un persona que queremos frena mucho a las personas, puesto que creemos que si nos cerramos en un lugar a hablar será doloroso».
La Asociación de Mediación y Acuerdos parte de las premisas de la voluntad, la voluntariedad, la neutralidad y la imparcialidad y la confidencialidad para llevar adelante el proyecto de difundir la cultura de la paz.
Las responsables del centro señalan que «se puede decir que la magia de la mediación es la comunicación y, permitir a las personas vivir las situaciones de conflicto desde una realidad diferente, mejor y positiva, puesto que establece los fundamentos de un buen abordaje para la construcción de acuerdos válidos para cada una de las partes, y que estos sean sólidos y perdurables en el tiempo». Ahora a escasos meses de la inauguración del centro ya son algunos los conflictos que están tratando con resultados muy positivos hasta el momento.
Este servicio ofrecido en Manacor y a toda la comarca, está amparado por la ley de mediación de hace dos años y las encargadas, Catalina Bassa, Xisca Amengual. Magdalena Grimalt y Xesca Dalmau, reclaman a la gente que «se dé la oportunidad de probarlo».
El centro abierto en la calle Jaume II de Manacor está abierto de lunes a jueves de las 17 a las 20 horas.