La Policía Local de sa Pobla inauguró ayer sus nuevas dependencias, que han ubicado en la antigua estación de tren del municipio. «No podíamos seguir bajo la escalera del Ayuntamiento», declaró el subinspector del cuerpo, Pere Perelló. «Necesitábamos unas instalaciones adecuadas a las actuales necesidades, independientes, y que al mismo tiempo estuvieran bien comunicadas para poder atender los casos de emergencia».
Las obras de habilitación de la antigua estación como cuartel han costado 38.000 euros, que ha pagado el Ajuntament. Cuenta con una zona administrativa, otra zona polivalente para uso de la tropa y tres despachos, uno de los cuales será para el edil de seguridad ciudadana, Sebastià Gallardo. Actualmente, la Policía Local de sa Pobla está formada por una plantilla de 24 agentes.
En la inauguración han estado presentes la consellera d'Interior del Govern, María Àngeles Leciñena; el conseller de Mobilitat, Gabriel Vicens, y el conseller insular de Interior, Joan Lladó. Vicens manifestó la voluntad de que las antiguas estaciones «no estén cerradas y que presten un servicio público a los pueblos donde se encuentran». La propiedad de la estación sigue en manos de Serveis Ferroviaris de Mallorca.