Una grave avería paralizó ayer por la mañana el ferrocarril de Sóller. La ruptura de uno de los cables bloqueó un convoy y forzó a que sus pasajeros tuvieran llegar hasta la ciudad andando. El tren, que debía llegar a las doce del mediodía a Sóller, quedó parado a la altura de la zona conocida como es cinc ponts.
Inmediatamente se avisó a la brigada del Ferrocarril, que acudió a la zona con la esperanza de arreglar rápidamente el problema. Sin embargo, al ver la gravedad de la avería, comunicaron a los pasajeros que tendrían que llegar a la ciudad andando, a través del camino de Montreals, que está a unos treinta minutos del centro de Sóller. Los pasajeros entendieron la situación, y sólo lamentaron tener que padecer el calor del mediodía.
Durante la tarde de ayer se devolvió el dinero de los billetes a todo aquél que fue a reclamar, ya que se suspendieron todos los trayectos previstos para el día, y el Ferrocarril puso a disposición de los viajeros varios autocares que les llevaron a Palma a la misma hora que tenían previsto volver en tren.
Las previsiones contaban con poder reiniciar hoy todos los servicios, ya que la avería, a pesar de ser aparatosa y costosa de arreglar, no fue tan grave como pareció en un primer momento.
Los pasajeros entendieron el problema y hubo pocas reclamaciones durante la tarde, lo que facilitó el trabajo del Ferrocarril. A pesar del incidente, los numerosos viajeros que iban en el tren pudieron pasar un día en el Valle de los Naranjos como tenían previsto.