Dos nuevas variedades de uva autóctonas, Giró Blanc y Gorgollassa, se unen a las seis clases de uva ya calificadas, tres de uva negra: Manto Negro, Callet y Fogoneu, y tres de blanca: Moll, Premsal Blanc y la Malvasia. Ahora estas dos variedades ayudaran a mejorar la personalidad de los vinos mallorquines.
La noticia fue acogida con satisfacción por los bodegueros presentes en el acto oficial de inicio de la vendimia de la Denominació d'Origen Pla i Llevant. Andreu Oliver, enólogo de Can Majoral, señaló: «Estamos muy contentos por la inclusión de estas dos variedades, que ya hace algunos años que las cultivamos y nos dan buenos resultados, especialmente el Giró Blanc que es una variedad muy espectacular, en cambio la Gorgollassa es más irregular».
La consellera de Agricultura, Mercé Amer, aseguró que «la entrada de estas variedades ofrecerá la posibilidad de hacer vinos de calidad en el mapa vitivinícola de las Balears, y permitirá mejorar la personalidad de estos vinos y también las posibilidades de comercialización». Asimismo, Amer destacó la importancia «de tener un producto diferenciado en un mercado tan competitivo como el del vino». El Govern ha apostado por la investigación como «una herramienta fundamental para mejorar la calidad y la penetración en el mercado de los vinos, por eso trabajamos conjuntamente Govern y productores para mejorar la calidad de nuestros caldos».
El sector vitivinícola ha sido el que ha mostrado un dinamismo y evolución más importante en los últimos años en Mallorca. «Hace tan sólo 25 años, en el 1983, no hubo producción de vino blanco», aseguró Oliver como muestra de la evolución de este producto en la isla.
«La producción para este año, se verá reducida alrededor del 30 por ciento, debido al mal año agrícola que hemos tenido», según indicaron los productores y bodegueros de las 13 bodegas inscritas en la denominación Pla i Llevant, y que cuentan con 347 hectáreas de vid.
«Las lluvias de mayo y junio provocaron la proliferación de enfermedades como el mildiu. Ahora lo tenemos controlado y todo parece que la vendimia será buena, pero la bajada de la producción será importante», señaló Andreu Majoral.
Esta misma semana han iniciado la vendimia los primeros bodegueros y poco a poco lo harán los otros dependiendo del grado que presente la uva en cada una de las vides de la denominación.
La producción de uvas en los últimos cuatro años se había mantenido por encima del millón de kilos, en uva negra y sobre el medio millón en uvas blancas. Ahora pese las lluvias las previsiones son superiores a las del año pasado, pero muy por debajo de la cosecha de 2006. Estos días los primeros mostos serán de Chardonay, Pinot Noir, Merlot, Tempranillo o Riesling, para luego en septiembre vendimiar el Premsal Blanc, el Macabeu, Callet, Syrah o Fogoneu, entre otros.