El Ajuntament de Binissalem tuvo que hacerse cargo hace poco más de tres meses del apuntalamiento de una casa ubicada en el casco antiguo del municipio por orden del departamento de Patrimonio del Consell. A día de hoy, el Consistorio de Binissalem mantiene la casa apuntalada y la calle cortada, «con los problemas que ello conlleva», explicó el alcalde del municipio Jeroni Salom (PP).
El alcalde añadió que «esperamos que desde Patrimoni nos indiquen qué debemos hacer ya que la situación actual tiene un coste para el Ajuntament» y añadió que «después debemos pasar la factura a los propietarios de la casa, ya que ellos deben hacerse cargo de preservar el patrimonio». Sin embargo, desde el departamento de Patrimoni del Consell sostienen que «nosotros actuamos de urgencia al indicar que la casa se debía apuntalar ya que existía el peligro de derrumbe de una parte del edificio», y aseguran que «ahora son los propietarios quienes deben tomar las medidas oportunas para la preservación del patrimonio, ya que se trata de una propiedad privada».