El Ajuntament de Son Servera se ha visto obligado a asumir la dotación de servicios del Port Verd ante la pésima situación de la urbanización y ante las continuas quejas de los residentes. En estos momentos, los técnicos municipales están redactando el proyecto cuya ejecución puede ascender a los tres millones de euros que se cobrarán a los vecinos a través de contribuciones especiales. Así lo explicó el alcalde de Son Servera, Josep Barrientos, que anunció que las obras podrían empezar en invierno.
Hay que recordar que desde hace años es una vieja reivindicación vecinal, ya que tal y como están los servicios principales no se puede acoger a la población prevista y también, según los técnicos, es una de las causas de la irregularidad de muchas de las licencias otorgadas.
Por otra parte, existe un informe del Consell de Mallorca que concluye que el Port Verd no puede soportar más construcciones ante la carencia de los servicios básicos como alcantarillado, agua potable o suministro eléctrico. En muchas calles no hay aceras, las farolas están estropeadas o el asfalto está dañado y en mal estado.
El Port Verd hace muchos años que está en el punto de mira. Desde finales de la pasada legislatura los vecinos se constituyeron en asociación para denunciar la avalancha de construcciones y la irregularidad de muchas de las licencias.
El alcalde y el regidor de Urbanismo, Joan Riera, se lamentan de la situación actual de esta urbanización a la vez que anunciaron que la próxima semana se aprobarán inicialmente una revisión de la normas subsidiarias con el objetivo principal de frenar el crecimiento urbanístico y garantizar la sostenibilidad del municipio.