La presidenta del Consell, Francina Armengol, visitó ayer la fábrica de galletas Quely de Inca, junto a la consellera insular d'Economia, Bel Oliver. Armengol comprobó de primera mano el proceso de producción de las diferentes galletas que se fabrican en Inca y valoró la apuesta de «innovación» que ha llevado a cabo esta empresa «emblemática».
El conseller delegado de Quely, Gabriel Coll, explicó ayer que actualmente Quely exporta a 17 países una cantidad constante de sus productos. A nivel mundial, el proceso de expansión de Quely ha llegado ya hasta Asia y a los países del Golfo Pérsico y uno de los próximos retos para la empresa es conquistar el mercado americano.
Coll explicó que el proceso de crecimiento de la empresa ha obligado a plantearse el traslado de la fábrica, aunque no concretó las fechas.
Uno de los retos de la conocida fábrica de galletas de la ciudad de Inca es conseguir implantar el nuevo envase de galletas que, en una primera fase, ha provocado algunas quejas. «Es un proceso de adaptación que ha requerido algunas mejoras que hemos solucionado», explicó el gerente de la empresa Gabriel Coll, que detalló que «uno de los motivos por los que se ha optado cambiar el envase viene originado por el aumento de exportación de las galletas Quely».
Durante la visita a la fábrica, la presidenta del Consell destacó la importancia de la empresa Quely como referente empresarial emblemático de Mallorca.
Después de la visita a la empresa, la presidenta del Consell, Francina Armengol, asistió a una comida con los jóvenes empresarios de la ciudad de Inca.
Más de veinte empresarios, miembros de la asociación Joves Empresaris de Balears, comieron con Armengol; la consellera d'Economia, Bel Oliver, y el director insular de Innovació, Pere Joan Pons. Durante el encuentro, la presidenta del Consell aprovechó para presentar la convocatoria de subvenciones económicas que ha abierto el Consell para mejorar el acceso a las nuevas tecnologías a las empresas de Mallorca. La subvención está dotada con 150.000 euros.