El Consell de Mallorca ha decidido asumir lo antes posible el mantenimiento de las nuevas carreteras que se construyeron la pasada legislatura. Las carreteras -prolongaciones de las autopistas de Inca, Ponent y Llucmajor, variantes de Son Ferriol-Casablanca, Manacor y Sant Llorenç, un tramo de la carretera de la UIB, tercer carril de la autopista de Inca hasta Alcampo y el túnel de sa Mola- habían sido recepcionadas por el Govern de les Illes, que promovió su construcción, pero la titularidad de éstas no había pasado al Consell de Mallorca, organismo que tiene las competencias en carreteras.
Mientras tanto, todas estas vías llevan más de un año sin ningún tipo de mantenimiento. La imagen en algunos casos es deplorable, porque no se ha cuidado la vegetación y algunas de ellas además presentan deficiencias como grietas o blandones.
El Consell no quería hacerse cargo de ellas hasta que las constructoras hicieran los arreglos pertinentes y las carreteras estuvieran en condiciones, pero finalmente ha decidido responsabilizarse y comenzar el mantenimiento. «Entendemos que las carreteras no pueden seguir en este estado», explica el director insular de Carreteres, Gonzalo Aguiar. «Ahora tendremos que buscar soluciones de tipo económico para poder llevar a cabo la conservación de las carreteras».
Antoni Armengol, director general d'Obres Públiques, indicó que desde que llegaron al Govern se ha trabajado en hacer posible el traspaso. «Nosotros también somos los primeros interesados en que se lleve a término un buen mantenimiento de las carreteras», dijo. De todos los nuevos proyectos, el Consell sólo había asumido la gestión del túnel de sa Mola. Y, en breve, tendrá lugar el traspaso del acceso a la Universitat y el tercer carril de la autopista de Inca hasta Alcampo, según anunció Armengol.
En otras carreteras como en la autopista de Ponent o variantes de Son Ferriol-Casablanca se realizan arreglos por las deficiencias detectadas.