El Ajuntament d'Alcúdia ha certificado obras no realizadas en las antiguas casas de Can Ramis para así poder cobrar la subvención del Consell de Mallorca otorgada para realizar la rehabilitación de la zona. El alcalde, Miquel Ferrer, explicó ayer que han tenido que certificar estas obras «debido a un error en el presupuesto». Ferrer dijo que «la rehabilitación del paseo Pere Ventayol sólo tenía un presupuesto de 60.000 euros y en realidad ha costado 850.000 euros».
Además, el alcalde añadió que «en las casas de Can Ramis se ha gastado más de 325.000 euros para realizar la demolición del antiguo edificio y dotar de servicios la zona».
Por esta razón, los técnicos del Ajuntament han certificado unas obras que se deben realizar en las casas de Can Ramis que aún no se ha construido para poder tener el dinero para terminar las obras en el paseo y no dar una mala imagen a los miles de visitantes que acuden al mercado que se celebra en el paseo Pere Ventayol durante el verano. Pero aún así, el alcalde Ferrer, señaló que «la cantidad certificada y pagada por el Ajuntament es inferior a la inversión ejecutada en Can Ramis y en el paseo».
En este aspecto, el alcalde manifestó que ahora «el Ajuntamet deberá pagar las obras que aún faltan por ejecutar en las casas de Can Ramis», aunque manifestó que la partida ya está contemplada en los presupuestos de 2008.
Las obras de rehabilitación de Can Ramis llevan un retraso de unos siete meses debido a los problemas internos de la empresa adjudicataria (Crespí). Desde el Ajuntament han asegurado que «se tomarán todas las medidas necesarias para que el recinto de la obra esté en las mejores condiciones posibles para que no ocasione problemas».