Pasado un tiempo ya desde su inauguración, ahora están apareciendo algunos defectos en las nuevas obras de carreteras. En la autopista de Ponent, en concreto, en el enlace de la Costa de la Calma, se procede en este momento al arreglo de un enorme muro de contención de 35 metros de ancho y 8 de alto, donde han aparecido una serie de grietas, motivo por el cual desde finales de febrero está cortado al tráfico este enlace.
La deficiencia tiene su importancia, puesto que el muro sustenta el vial de la autopista, según explica Antoni Armengol, director general d'Obres Públiques. «El sistema proyectado para sustentar este muro con malla metálica no es el tradicional; es una solución que no está probada y garantizada», indica Armengol.
Informe
Ante el resultado fallido, la Conselleria d'Habitatge i Obres Públiques procede ahora a la construcción de un tradicional muro de contención de hormigón superpuesto al que hay y que garantizará la efectividad del muro.
El objetivo de la Direcció General d'Obres Públiques ahora es dilucidar si se adoptó el sistema equivocado o si bien, fue mal ejecutada. Armengol afirma que se ha encargo un informe que determinará el motivo de las grietas y que determinará asimismo quién debe asumir el coste de la deficiencia. «En principio», asegura el director general, «consideramos que no lo tiene que asumir el Govern». De hecho, la obra en este momento la realiza la adjudicataria del proyecto.
El cierre del enlace está previsto que dure cinco semanas, con las consiguientes molestias para los usuarios de la vía. Los vehículos que quieran acceder a la Costa de la Calma desde la autovía en dirección a Andratx han de continuar hasta la salida 20, de Peguera. Asimismo, los conductores que quieran incorporarse a la vía rápida desde Costa de la Calma lo tendrán que hacer por la salida 17, de Santa Ponça.