Cuando parecía que el conflicto con GESA había quedado soterrado, una nueva amenaza sale a la luz. El proyecto para hacer la nueva subestación de transformación eléctrica en Capdepera previsto por la empresa energética con el cableado aéreo, podría afectar la zona húmeda de la Farinera, una área de gran valor tanto por su patrimonio natural como etnológico.
Este bucólico y encantador paraje, aunque parezca la serra de Tramuntana, está ubicado entre Artà y Capdepera, y forma parte del curso de agua del torrente de Canyamel, y ya en época musulmana se establecieron a lo largo del torrente una serie de molinos, como el de la Farinera, ubicado al lado del humedal, y que cuenta con una espectacular acequia de más de 90 metros de longitud.
En el municipio gabellí se han empezado a levantar voces a favor de la conservación de este espacio, y el Ajuntament ha anunciado que pedirá que se tomen medidas para evitar que las líneas aéreas afecten a este lugar. Tras siete años de conflictos, polémicas y de lucha por conseguir que el cableado fuera soterrado, el equipo de gobierno actual echó la toalla y anunció en el mes de febrero que permitiría a Gesa hacer el cableado aéreo.