El pleno del Ajuntament de Pollença aprobará el próximo jueves nuevas facturas extrajudiciales correspondientes al ejercicio presupuestario del 2007 y que superan el millón de euros. Se cumplen así los peores augurios del equipo de gobierno municipal (UM, PSOE, PSM) que anuncia desde hace meses la delicada situación económica en que quedó el Ajuntament al finalizar la legislatura pasada.
Al millón de euros que se han gastado de más a lo largo de 2007, se suman las extrajudiciales de otros organismos autónomos como pueden ser la Empresa Municipal de Servicios , el patronato de la residencia de la Tercera Edad o el patronato de Turismo.
Ya el pasado junio cuando el nuevo equipo de gobierno municipal tomó las riendas del Ajuntament denunció que muchas partidas económicas estaban completamente agotadas por lo que para poder hacer frente al gasto corriente habría que comprometer partidas económicas de las Cuentas de 2008. Mientras que UM carga desde hace meses la responsabilidad en su ex socios de gobierno de la coalición PP-UMP, el ex alcalde Bartomeu Cifre (PP) corresponsabiliza a sus ex socios de UM. Cifre llegó a votar a favor de una propuesta de EU para hacer una auditoría de las cuentas municipales, pero la propuesta no prosperó al no contar con el apoyo del resto de grupos que descartaban hacer la auditoría basándose en un informe de intervención.
Que la situación económica de las arcas municipales está bastante comprometida es a estas alturas algo más que evidente. Por poner un ejemplo, entre las deudas que arrastra la Empresa Municipal de Servicios (Emser) destaca la que corresponde a la tasa de incineración. Tirme reclama a Emser el pago de una deuda pendiente de 2.300.000 euros por este concepto, cifra a la que hay que sumar 162 mil euros de intereses. El patronato de la residencia cierra el ejercicio con cerca de 600.000 euros de déficit y el déficit del patronato de Turismo supera los 60.000.