GESA-Endesa ha puesto en marcha un ambicioso proyecto para reducir las emisiones de gases nocivos a la atmósfera en la central eléctrica de es Murterar, en Alcúdia. La compañía eléctrica ha invertido 45 millones de euros en la construcción de una instalación de desulfuración que reduce a un tercio las emisiones de azufre y a un quinto las emisiones de partículas contribuyendo así a minar el efecto invernadero en las Islas. Las nuevas instalaciones, que funcionan en pruebas desde el pasado diciembre, estarán plenamente operativas de aquí a dos meses.
El conseller de Medi Ambient, Miquel Àngel Grimalt visitó ayer las instalaciones acompañado de la directora general de Cambio Climático, Magdalena Estrany.
El conseller de Medi Ambient explicó que «desde la Conselleria estamos impulsando el plan estratégico balear contra el cambio climático para ahorrar energía y aumentar la eficiencia, pero por mucho que avancemos necesitamos seguir consumiendo energía y eso implica que GESA-Endesa haya de trabajar para reducir las emisiones y ser lo más eficiente posible».
En este sentido, indicó que «en nuestra comunidad los grandes productores de gases que contribuyen al efecto invernadero son el parque móvil y los productores de energía y, por eso, es importante que las plantas productoras incorporen todas las mejoras tecnológicas».
Miquel Àngel Grimalt explicó que «confiamos en que a finales de 2009 a través del gasoducto llegue el gas natural a las centrales productoras de energía que están preparadas para utilizarlo porque es un combustible más apto desde el punto de vista medioambiental, pero la central de Es Murterar tiene muchos años y funciona con otro combustible, el carbón, y hay que decir que también es bueno que haya una diversificación en caso de que haya una emergencia, aunque esa diversificación implica un esfuerzo para reducir la emisión de gases contaminantes».