En Manacor las intensas lluvias caídas en las últimas semanas no han causado daños de consideración, pero fueron lo suficientemente fuertes como para sacar a la luz restos humanos que estaban enterrados en un camino rural de una finca rústica de la ciudad, entre la carretera de Son Carrió y Son Mas.
En principio y según las primeras hipótesis, se trataría de los hue sos de un niño o de una mujer puesto que son de reducidas dimensiones. A la espera de que sean desenterrados, todos los restos y los posteriores análisis forenses, se estima que los cuerpos podrían tener una antigüedad de entre 50 y 100 años.
En el lugar y semienterrado, se puede apreciar el cráneo y la espina dorsal de un cuerpo y la corteza de lo que podría tratarse del cráneo de otro. Sin embargo, no se descarta que las excavaciones saquen a la luz más huesos y restos del mismo o de otros cadáveres. En las inmediaciones de los cuerpos había pequeños restos óseos cuya procedencia se determinará con la reconstrucción de los cadáveres.