Un año más, una de las fiestas que con el paso del tiempo se ha consolidado dentro del calendario festivo de Portocolom, ha sido el tradicional y multitudinaria sopar a penyes.
El pasado viernes al anochecer, la gente empezó a llegar cargada con las cestas de comida y bebida. El objetivo: pasar una velada en la orilla del mar, cena, bañarse y bailar al sonido de la música encima la arena.
Es el ya tradicional y conocido como sopar a penyes, que cada año por estas fechas se organiza en las playas de s'Arenal Gran y s'Arenal Petit de la zona costera.
En los últimos años son tantos los vecinos que acuden que se calculan que la participación llega a las 5.000 personas. Además, y por evitar las aglomeraciones, son muchos los que también aprovechan por ir en barca. Todo por pasar una velada de fiesta y hermandad que acaba de madrugada.