GLORIA JULIA
Los continuos vertidos de aguas fecales en las acequias de la zona de Son Pastor, de Montuïri, han provocado las quejas de muchos vecinos. Cuentan que hace años que tienen que soportar los malos olores de las acequias.
En Son Pastor, hay una zona de desembocadura donde confluyen las aguas residuales del pueblo.
Una red de acequias pasa cerca de las fincas rústicas, dedicadas al cultivo. Estas fincas son las principales afectadas por el vertido de aguas residuales. Según ha explicado la propietaria de una de estas casas, «hace muchos años que las casas de esta zona sufrimos las consecuencias de la mala gestión de las aguas y, por lo que parece, el Ajuntament continúa sin hacer nada».
Hace ya seis años que se iniciaron las primeras fugas de la red de alcantarillado en la zona de Can Perot, de las que ya informó este periódico. Según explican los vecinos, hay años en que los vertidos han sido repetidos y muy graves: «Hasta han llegado a salir residuos muy contaminantes, como restos de pintura o de productos químicos».
Los vecinos de estas zonas han llegado a preocuparse por su salud: «Nosotros sacamos toda el agua de aquí. Muchas veces hemos pensado que enfermaríamos».
A parte de ser un peligro para la salud, estos residuos han provocado la contaminación de muchos pozos de la zona, de los que se saca agua para regar: «Hay pozos que han quedado totalmente contaminados a causa de las filtraciones de estos vertidos. Hay algunos de los que no estamos seguros si están contaminados por este motivo. El caso es que estamos cansados de tener que aguantar el mal olor y las molestias», comentan.