MARTA MEDRANO
Tras 14 años con problemas de nitratos y sulfatos en el agua potable los más de 2.000 habitantes de Maria de la Salut podrán volver a beber agua del grifo. Dentro de un mes está previsto que la conexión entre el acuífero de Sa Marineta, ubicado en el término municipal de Llubí, y la red de agua de Maria, sea una realidad. Así lo confirmó ayer el conseller de Medi Ambient, Jaume Font, junto con el director general de Recursos Hídricos, Joan Crespí, en una visita a las obras que se están llevando a cabo junto a la carretera que conecta Muro y Sineu.
Font aprovechó para recordar a los propietarios de fincas afectadas por estas obras que el Govern pagará el asfaltado de los caminos rurales. «Me consta que ha habido quejas por cómo han quedado algunas fincas con obras tras las lluvias de las últimas semanas y por eso quiero que los propietarios sepan que asfaltaremos de nuevo todos los caminos afectados», explicó el conseller, que avanzó que la mejora de la calidad del agua no conllevará un coste añadido en las tarifas de Maria.
En total la inversión ha ascendido a 2.497.144 euros y ha consistido en ejecutar una tubería de 7,9 kilómetros entre Sa Marineta y Maria y otra de sólo 276 metros que conecta la primera con los depósitos de agua del pueblo.
El proyecto ha incluido además la construcción de un pozo adicional y una canalización específica que llevará agua de sa Marineta a Llubí y que servirá para garantizar que este otro municipio cuente siempre con agua de calidad.