J.SOCIES/J.M.SASTRE
Montuïri vivirá hoy un Encuentro entre la Virgen María y Jesús resucitado envuelto en polémica. La decisión de cambiar de ubicación la celebración del Encuentro ha creado revuelo entre los vecinos de la localidad puesto que supone el fin de una tradición que ya duraba 130 años. Desde 1878, este acto religioso se ha celebrado ante la posada de la familia noble de Can Socies de Tagamanent, pero hoy el Encuentro se realizará en las escalinatas de la iglesia parroquial.
Este cambio, que acaba con una tradición ancestral, ha suscitado todo tipo de comentarios en Montuïri y se han levantado no pocas voces contrarias que no entienden esta modificación en el escenario del Encuentro. El sacerdote de la parroquia, Miquel Mascaró, justificó el cambio: «En Montuïri, como en otros muchos pueblos, hay tradiciones que perduran con el paso de los tiempos pero a veces no se ajustan al paso de los tiempos y hay que hacer una readaptación».
Mascaró añadió que Can Socies «es una familia noble y de allí sale la madre de Dios y no era posible hacer un buen Encuentro porque es una calle estrecha». «Ante las sugerencias de jóvenes y también de personas mayores de que se pudiera hacer en la plaza, ante la escalinata de la iglesia, para tener mejores vistas, entablamos un diálogo fraterno con la familia Socies y llegamos a un acuerdo», apunta el párroco.