La seguridad de la carretera de sa Calobra centró ayer la reunión mantenida por el Consell de Mallorca con la Conselleria d'Interior, Tráfico y transportistas tras el grave accidente del domingo en que murió el conductor de un autocar. El encuentro finalizó sin conclusiones y se emplazaron para una próxima reunión en que se platearán soluciones. Pero, ¿qué soluciones? La Federación Empresarial Balear de Transportes reivindica mejoras en la carretera con el objetivo de incrementar la seguridad en esta carretera, pero incluso estas mejoras son limitadas, según explica Gonzalo Aguiar, director insular de Carreteres del Consell. La carretera de montaña tiene pocas posibilidades de intervención y las actuaciones de las brigadas del Consell se limitan a ganar un poco de espacio en algunas curvas para que los autobuses puedan pasar, a quitar la vegetación o instalar algunas barreras.
«En sa Calobra hay que adaptar los vehículos a la vía y no la vía a los vehículos», expone Aguiar. De hecho, en algún momento se ha planteado el reducir el peso y la longitud de los autocares turísticos de sa Calobra, pero la propuesta no ha prosperado. Y es que cualquier actuación de envergadura en la carretera sería un atentado paisajístico, según reconoce Aguiar. A su juicio, «todos tendríamos que poner de nuestra parte, incluida la Federación de Transportistas».De hecho, la seguridad de sa Calobra siempre está sobre la mesa de las reuniones de la Comisión de Seguridad Vial, y las mejoras son constantes en esta vía. También se ha actuado en cuestiones de señalización. La carretera de sa Calobra tiene un tráfico diario de 3.120 vehículos, y es en primavera y verano cuando la circulación por la vía se intensifica. Precisamente por la sinuosidad de la carretera de sa Calobra, los accidentes graves no son muy frecuentes. De hecho, han tenido que pasar 40 años para que se registrase un accidente mortal de un vehículo pesado. En 1969, se despeñó un camión de coca-cola. Se trata de una carretera singular, enclavada en plena Serra de Tramuntana protegida por la Ley de Espacios Naturales (LEN). Esta protección impedirá emprender cualquier actuación de consideración.