J.SOCIES
Indignación. Ésta es la palabra que utilizan una vez más los vecinos de las calles Ramon Llull, Emili Pou, Mestre Josep Porcel, y sa Torre de Montuïri después de años de quejas y protestas y aun tienen que sufrir el continuó paso de vehículos por dentro del casco urbano. El Consell de Mallorca ya tiene el proyecto de construcción de una ronda de circunvalación que tiene que unir la carretera de Porreres con la Sant Joan, y los camiones de gran tonelaje no pueden circular por el centro del núcleo urbano, pero la realidad es otra, y cada día, por la mañana, al mediodía y por la tarde, principalmente continúan circulando los camiones, sin que nadie ponga solución.
En el cruce de la calle Ramon Llull con la calle Emili Pou, en la carretera que va a Sant Joan, ya es la sexta vez que los camiones con sus maniobras derriban las paredes o columnas del patio delantero de una casa. La última vez los propietarios ya optaron por no levantar la columna y solo dejar la pared baja, pero ni así. Recientemente un camión ha vuelto a tirar las columnas y la reja del patio.
Muchas otras casas presentan grietas por el paso de estos vehículos. Otras calles vecinas como las de Gaspar Oliver y Joan Alcover presentan el mismo problema, con las camiones que circulan hasta una empresa de materiales de construcción cercana, sin que Policía Local ni Guardia Civil actúen.