La alcaldesa de Felanitx, Catalina Soler (PP), lo tiene muy claro. La decisión de suspender el pleno fue «única y exclusivamente» para cumplir la ley. La batlessa se defendió de las acusaciones de la oposición y aseguró que en ningún caso ha querido eludir el debate de la concesión de las polémicas licencias otorgadas por el Ajuntament. Soler señaló que «es imposible que no quiera debatir este tema cuando ya hay convocado un pleno para el próximo viernes, a las 20,30 horas». La alcaldesa también manifestó que «de ninguna manera lo he hecho para ganar tiempo, ya que sólo quiero solucionarlo cuanto antes. Esta era una sesión plenaria muy importante ya que se tenían que tratar los presupuestos, y ante la ausencia del funcionario el pasado sábado cualquier ciudadano hubiese podido impugnar el pleno».
En referencia a la ausencia de Llorenç Nicolau de su puesto de trabajo el pasado día 3 de febrero, Soler señaló que se enteró de los hechos al mediodía y el lunes a primera hora abrió expediente contra el funcionario. Por su parte, éste le presentó ayer la baja por enfermedad. La alcaldesa dejo claro que «no hay ningún trasfondo en la ausencia de Nicolau de su lugar de trabajo».
Los partidos de la oposición coinciden en señalar que esta situación ha dejado muy tocado el nombre de Felanitx, y que «con estos hechos hemos tocado fondo en la política felanitxera», aseguraba Nicolau Barceló, de EU-EV, mientras que Miquel Julià, de UM, calificaba de «espectáculo» los hechos de Soler. Por parte del PSM, Bernadí Monserrat señalaba que «en el Ajuntament siempre se ha hecho lo que la alcaldesa quiere, los otros sólo agachan la cabeza». Bennassar del PSOE dijo que «este es el talante de nuestra alcaldesa y la democracia que tenemos en Felanitx».