PEDRO AGUILO MORA
Los votos favorables de PP y ASI fueron suficientes para que el pleno del Ajuntament de Llucmajor, reunido ayer en sesión plenaria, aprobase la propuesta de efectuar una aportación de 1,4 millones de euros a la empresa municipal de servicios Llemsa para sufragar la deuda contraída por ésta durante el año 2006.
El alcalde Lluc Tomàs (PP) anunció al pleno que existen «tres sistemas» para afrontar el déficit de la empresa municipal: la obtención de subvenciones, la extensión de facturas municipales y la ampliación de capital por parte del Consistorio, y fue precisamente esta última por la que optó el equipo de gobierno, ya que según el alcalde, mediante este sistema, el Ajuntament queda exento de abonar el IVA.
Desde las filas de la oposición, el portavoz del PSOE, Antoni Garcías, rechazó la decisión adoptada por Tomàs: «no me parece bien de ninguna de las maneras», manifestó, y añadió que la «excusa» de no tener que pagar el IVA «no vale». Por parte del PSM, Joana Lluissa Mascaró aseguró que, desde el Consistorio delegó en Llemsa la gestión de los servicios municipales, «los servicios no han mejorado y las pérdidas son mayores». En cuanto a UM, Tomàs Cantallops criticó que una empresa que en 2006 contó con un presupuesto de tres millones de euros al final del ejercicio haya acumulado un déficit tan «desmesurado». «O es que ha habido una mala gestión o es que Llemsa ha hecho cosas que no estaban presupuestas», agregó Cantallops.