A.BASSA/J.M.SASTRE
Los alumnos de seis cursos de Educación Primaria del colegio Sant Miquel de Son Carrió realizarán sus clases en aulas improvisadas en los edificios de Ca n'Apol·lònia y el centro sanitario, mientras se ejecutan las obras de emergencia en el centro educativo.
Las fuertes lluvias caídas en la semana anterior a las fiestas de Navidad, provocaron las quejas de los padres y madres de alumnos por las goteras y humedad que padecían a causa del mal estado del techo del colegio. El AMPA amenazó con no llevar a los niños al colegio después de Reyes si no se había solucionado el problema en la infraestructura.
Las reclamaciones fueron escuchadas y anteayer comenzaron las obras de sustitución de la cubierta en tres aulas. El presupuesto del proyecto asciende a 109.000 euros que pagarán a partes iguales entre la Conselleria d'Educació i Cultura y el Ajuntament de Sant Llorenç.
El término de ejecución de las obras es de poco más de un mes, con lo que concluirán a finales del próximo mes de febrero. Será entonces cuando los alumnos de los citados cursos regresarán a sus aulas de origen y reemprenderán las clases con normalidad y, lo más importante, en condiciones.
Desde la AMPA expresaron su satisfacción por la ejecución de este proyecto de mejora que venían reclamando desde hace 10 años. Así mismo están conformes con las condiciones en que realizarán las clases sus hijos de forma provisional en las aulas habilitadas en los citados edificios.El alcalde de Sant Llorenç, Mateu Puigròs, apuntó que desde el día 12 de octubre «teníamos previsto firmar el convenio con la Conselleria d'Educació para las obras de mejora del colegio». Sin embargo, las fuertes lluvias caídas el mes de diciembre «evidenciaron el mal estado del colegio y aceleraron el proceso de ejecución», apuntó el alcalde.