J.T.B./J.M/J.J.
El Consell de Mallorca entró ayer de lleno en el escenario donde se desarrolla el «caso Andratx» y mostró su disposición a asumir algunas competencias urbanísticas que ahora están en manos del municipio. Lo hizo tras recibir una providencia del juez en este sentido tras una petición de ayuda del propio Consistorio. El juez que instruye el caso remitió ayer una providencia a la institución insular en la que le proponía que valorara la conveniencia de subrogarse en las competencias municipales de Urbanismo. No de descarta, incluso, que haya que suspender todas las licencias que se están tramitando para evitar males mayores. La próxima semana se conocerá cuál es el grado de implicación que finalmente asume la institución que preside Maria Antònia Munar. El día anterior, el Consell se había mostrado contrario a asumir las competencias. Ayer mostró su disposición a colaborar en lo que sea.
Fue una de las noticias políticas del día, el día en que, según una llamada anónima, debían haberse producido nuevos registros en otros ayuntamientos. No hubo registros. La otra noticia política tuvo como escenario el Parlament. Jaume Matas, a preguntas de la oposición, habló por primera vez en la Cámara de este caso. En los pasillos, José María Rodríguez, aportó ayer un nuevo dato: que había oído rumores, en los días previos a la detención de Hidalgo, de posibles actuaciones judiciales. Luego se reunió con alcaldes del PP, que expresaron su tranquilidad y defendieron la gestión de sus municipios.
Ayer continuaron las diligencias y quedó libre, pero con cargos, la esposa del celador Jaume Gibert. La Policía Judicial interrogó durante casi dos horas a Antonia Garí, que sigue imputada. Por otra parte, otro hecho fue largamente comentado: la relación del despacho de abogados contratado por el Govern para asesorar al Consistorio de Andratx en otro caso de presunta corrupción.