M.NADAL
La estrecha y peligrosa carretera que une Sencelles con Santa Maria (Ma-3020) se convertirá en una carretera nueva que respetará el trazado original de la vía existente. El Consell de Mallorca anunció ayer el inicio de las obras que tendrán una duración de 18 meses y costarán un total de 7.500.000 euros.
El director insular de Carreteras, Gonzalo Aguiar, explicó que «la carretera tiene unas característica peculiares con quiebros complicados y zonas muy estrechas por lo que no está preparada para absorber el tráfico que circula por ella». El trazado de la nueva vía respetará al máximo el existente «menos en la zona de Ses Alquerias, en el municipio de Santa Eugènia, donde el trazado se desplaza unos 400 metros para que las obras no afecten a unas casas antiguas. Además también se construirá una rotonda para evitar posibles accidentes», según Aguiar. En el cruce de la carretera con el pequeño núcleo urbano de Biniamar también se construirá otra rotonda.
La presidenta del Consell, Maria Antònia Munar, se mostró satisfecha por haber empezado las obras y resaltó que «esta legislatura ha destacado por ser la legislatura de las soluciones a los problemas reales de la gente». Además, Munar aseguró que «es una vía en la que se han producido un gran número de accidentes y que necesitaba la mejora».