P.GIRART/ J.SAMPOL
Un grupo de comerciantes ha criticado que sea obligatorio asistir al mercado de Capdepera para los puestos que también participen en el mercado de Cala Rajada. Así, la participación en Capdepera se ha convertido en condición sine qua non para los vendedores que también quieran estar en Cala Rajada.
Los comerciantes se han opuesto a esta obligación, impuesta por el Ajuntament de Capdepera para promocionar el mercado de la localidad.
Afirman que esta imposición es «ridícula» y que «somos nosotros los que al final salimos perjudicados. Esto es una ruina». «El día que se celebra el mercado de Capdepera, el miércoles, hay muchos más mercados donde podríamos ir. No es justo que nos obliguen a asistir donde casi no viene nadie», se quejaba los afectados. En cambio, muchos de los vendedores del mercado son vecinos de Capdepera y ellos no se posicionan ante esta obligación del Consistorio porque quieren vender en su pueblo.