Uno de los objetivos del Consell de Mallorca en materia de carreteras ha sido mejorar la seguridad de las vías que presentaban peligrosidad, además de registrar una elevada densidad de tráfico. Bajo esta premisa, ayer se inauguraba la reforma del tramo Cala Morlanda-Sa Coma, incluido en la reforma integral de la carretera Porto Cristo-Son Servera, iniciada hace cinco años. Con esta actuación la carretera quedará remodelada. El presupuesto invertido por el Consell en esta última fase sube a dos millones de euros.
Ayer, tuvo lugar la inauguración oficial de este tramo que contó con numerosas autoridades, entre otras, el conseller de Obras Públicas del Consell, Antoni Pascual; la consellera de Cooperació Local, Catalina Julve; el director insular de Carreteras, Gonzalo Aguiar, y los alcaldes de Manacor, Sant Llorenç y Son Servera.
Aguiar explicó que «se han eliminado las imperfecciones del trazado, en concreto curvas cerradas sin visibilidad y cambio bruscos de rasante. El nuevo eje de la carretera permite una conducción más cómoda y segura con unas cotas de visibilidad adecuadas».
Asimismo, explicó que se ha hecho un ensanchamiento de la carretera hasta duplicar la sección actual. La calzada pasa a tener diez metros de anchura, con dos carriles.