La inestable situación económica que arrastra el Ajuntament de Artà desde hace años unido al excesivo gasto corriente (personal, bienes y servicios del Ajuntament) ha obligado al actual equipo de gobierno en minoría (PSOE-UM) a tomar una drástica decisión. Las inversiones de este año quedaran vinculadas a la obtención de subvenciones. Así se refleja expresamente en las bases de ejecución del presupuesto de este año. Unos presupuestos que fueron aprobados gracias al voto favorable de EU-EV y al «voto de confianza» de Unió Independent d'Artà (UIA).
Era el primer pleno de un equipo que gobierna en minoría después que la alcaldesa socialista, Maria Francisca Servera, cesara el pasado día 31 de mayo al regidor de EU-EV, Julen Adrián por su anuncio de presentar enmiendas a los presupuestos municipales. Lo hizo pero, tal y como le advirtió la primera vara, desde la oposición. Pese a ello cumplió con su promesa de votar a favor del ejercicio presupuestario, entre otras cuestiones porque se habían incluido los mecanismos de participación ciudadana de la Colònia de Sant Pere.
El presupuesto de ingresos de 2006 asciende a 10.503.665 euros y de estos 7.197.662 euros se dedican a gastos de personal y 3.304.605 en bienes y servicios necesarios para el ejercicio de las actividades del Ajuntament y su funcionamiento. Las inversiones supeditadas a la obtención de subvenciones ascienden a 1.926 .000 euros.