PEDRO AGUILO MORA
El equipo de gobierno del PP en el Ajuntament de Llucmajor cerró filas en torno al alcalde Lluc Tomàs y rechazó la moción conjunta elevada ayer a pleno por PSOE, PSM y UM, en la que éstos exigían la dimisión del primer edil tras haber sido imputado judicialmente por el llamado «caso Rabasco».
El PP movilizó ayer a sus bases, y decenas de militantes -entre los que destacaba la presencia del secretario general de los populares en Llucmajor, Gaspar Oliver, y la directora general del Govern, Joana Xamena- abarrotaron la sala de plenos para ofrecer su apoyo al primer edil frente a la moción presentada por la oposición.
En representación de los tres partidos, el portavoz del PSOE, Antoni Garcias, apuntó que las imputaciones que pesan sobre Lluc Tomàs por los delitos de defraudación a la Administración y negociación prohibida a funcionarios como a cooperadores necesarios, y prevaricación continuada actuando en beneficio exclusivo de Joaquín Rabasco y en perjuicio de los intereses municipales, «son extremadamente graves porque van ligadas al cargo que ostenta y a su actuación como alcalde».
Por su parte, Tomàs tildó la moción presentada por PSOE, PSM y UM de «oportunista». También añadió que en el Consistorio que preside «no se roba y no hace ningún pago que no esté autorizado (en relación al pago y adjudicación de la organización de ferias y fiestas a una empresa vinculada a Rabasco) y concluyó asegurando que la moción «únicamente busca hacerme daño como persona y al partido político que represento».