JOSEP ROSSELLO
El pleno del Ajuntament de Calvià aprobó ayer con los votos del PP y del tránsfuga Joan Thomàs la enajenación de una parcela de 19.936 metros cuadrados en Costa den Blanes a cambio de una parcela de 4.000 en Son Ferrer, donde la empresa Nueva Àgora Centro de Estudios SL se ha comprometido a construir una piscina cubierta y un campo de fútbol. Isidre Cañellas, portavoz de UM, no asistió al pleno.
Ambas infraestructuras serán gestionadas por la citada sociedad por 30 años. Una vez transcurrido este tiempo, será el Ajuntament quien se haga cargo de ellas.
Desde la oposición, el portavoz del PSOE en el Consistorio calvianer, Antoni Manchado calificó la operación de «pelotazo urbanístico que beneficia claramente a un propietario privado vinculado a intereses inmobiliarios para construir un colegio destinado a unos pocos ciudadanos adinerados».
El líder del grupo socialista anunció que su formación interpondrá un recurso contencioso-administrativo contra la Corporación que preside Carlos Delgado (PP).
Al pleno asistieron unas cuarenta educadoras de las escoletes para reivindicar mejoras laborales. Denuncian que el 60 por ciento se encuentra trabajando en precario.
El teniente de alcalde del Ajuntament de Calvià responsable del área de Litoral, Bartomeu Bonafé (PP), anunció ayer que los concesionarios del servicio de velomares de las diferentes playas del municipio dispondrán el próximo martes de los permisos necesarios para poder iniciar de una vez el alquiler de las embarcaciones. Bartomeu Bonafé comentó a este diario que no ha firmado antes las autorizaciones por estrictas razones de «seguridad».