JOAN J. SERRA
La possessió de Galatzó, adquirida recientemente por el Ajuntament de Calvià por 9 millones de euros, será incorporada por la Conselleria de Medi Ambient al Pla d'Ordenació de Recursos Naturals (PORN) de la Serra de Tramuntana, por lo que en la finca, ya de titularidad pública, se aplicará alguna de las figuras de protección previstas por la Llei de Conservació d'Espais de Rellevància Ambiental, conocida como Leco.
No sólo eso. El conseller de Medi Ambient, Jaume Font, ha declarado a este periódico que la aportación del departamento autonómico de 1,5 millones de euros para la rehabilitación de les cases de Galatzó tiene como objetivo convertir éstas en uno de los centros de recepción de visitantes e interpretación de los espacios protegidos de la Serra de Tramuntana.
En este sentido, Font señaló que «para un espacio tan grande como Tramuntana, hemos considerado oportuno no crear uno, sino tres centros de recepción e interpretación. Estos tres centros se distribuirían estratégicamente. Uno en el norte, en Pollença; otro en el centro, en Escorca; y el tercero, en el sur. Estamos estudiando qué edificaciones ya existentes, ya que no tenemos intención de construir nada, pueden servir como centros de recepción e interpretación en Pollença y Escorca, pero el del sur de Tramuntana ya está decidido y serán les cases de Galatzó».
Los centros de recepción e interpretación sirven para regular las visitas a los espacios protegidos y para ofrecer todo tipo de informaciones, explicaciones y servicios a aquellas personas dispuestas a recorrer estas áreas naturales bajo figuras de gestión ambiental.
La finca de Galatzó, asimismo, podrá servir como centro neurálgico de excursiones apuig del mismo nombre, apuig de s'Esclop, y a los pueblos de Estellencs, Galilea, Puigpunyent y Capdellà.